Un nuevo estudio proteómico y estereológico de la amígdala cerebral realizado por el Grupo de Investigación de Neuroplasticidad y Neurodegeneración de la Facultad de la Facultad de Medicina de la Universidad de Castilla La Mancha revela la importancia que esta tiene en la progresión del Alzhéimer.

La investigación, la cual se ha realizado mediante el análisis del tejido cerebral de treinta y seis donantes procedentes de la Red Nacional de Biobancos, tiene su punto de partida en la tesis doctoral de Melania González Rodríguez.

Según el estudio, publicado en Brain Pathology, se produce una importante pérdida de volumen de la amígdala cerebral en la muestra de paciente y, aunque esta reducción no está relacionada no está relacionada con la pérdida de neuronas, sí se ha detectado un aumento importante de las células de glía, asociadas a la inflamación de la región de la amígdala.

Los últimos descubrimientos en el tratamiento y prevención del Alzhéimer pueden haber abierto nuevos caminos en la lucha contra esta dolencia, la cual, según la Organización Mundial de la Salud, afecta al a un sesenta o setenta por ciento de los cincuenta millones de personas que padecen demencia en todo el mundo.

Pie de foto: Amígdala izquierda en rojo, visible en un corte vertical de una resonancia magnética.